El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por José Mendoza
Señor PRESIDENTE, soy el maestro José Mendoza Samaniego y trabajé junto a usted en 1996 y 1997 en la Comisión de Asuntos Agropecuarios, VOTÉ por usted y mi familia. Hoy me siento triste al ver lo que quizás la IMPERICIA o un pésimo racimo de asesores lo han hecho cometer errores (y muy continuos), los cuales la población YA NO le va a perdonar. Más cuando recurre que esta situación es HEREDADA, por ello le recuerdo lo que decía la canciller Alemana, Angela Merkel, cito, “quienes aspiren a presidente de un país NO pueden culpar al gobierno anterior porque debía estar al tanto de la situación del país; recurrir a esto es sólo de mediocres”, cierro cita.
Presidente USTED nos dijo hace dos (2) años que iba a NEGOCIAR un nuevo contrato, lo que me hace pensar dentro de mi IGNORANCIA en gobernar que, tuvo la OPORTUNIDAD de darle a nuestro PAÍS un contrato JUSTO en todos sus puntos, como lo son: SOBERANIA, ecología, recursos monetarios, mejor trato a trabajadores, tranquilidad a los pobladores cercanos y otros cosas VITALES para una VIDA adecuada. Pero NO lo hizo y hoy el PUEBLO que es su JEFE le ha dicho *TE EQUIVOCASTE NITO*, ESCUCHELO, quítese a esos que le dicen a sus oídos que va bien, esa palabra de *JUDICIALIZAR* es del ministro Pino y de otros que le siguen y que usted sabe que NO les importa con su nombre y el de sus hijos. Recompense, con la derogación de esta ley, al PUEBLO que usted JURO SERVIR, porque muchos le advirtieron que no revistiera de legalidad lo que al margen de la Ley andaba, llevándose por los pechos el fallo de inconstitucionalidad del 21 de diciembre de 2017 que obliga a no tener un contrato de esta naturaleza que no haya surgido de una licitación publica donde se asegure el mejor interés de la nación.
Este contrato es inconstitucional, sin que yo sea abogado, porque surgió de una contratación directa, lo cual es una prueba del desacato a la decisión de nuestro máximo tribunal de justicia, y a la Asamblea le es prohibido como usted y yo sabemos, aprobar ninguna norma que confronte nuestro orden constitucional, y eso fue lo que se hizo.
Todavía no es tarde para enmendar, porque bien lo decía nuestro líder Omar Torrijos Herrera, es mejor emendar un error que perpetuar una injusticia
