El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Problemas De Geopolítica Y Desastres Internos.
Por : Ramiro Guerra.
jurista, Escritor Y Cientista Político.
¿Quienes tienen al planeta enredado? Una especie de locademia financiera que rayan en esquizofrenia por multiplicar dinero bienes al infinito. Controlar y dominar territorios y con ello robar los recursos minerales de naciones pobres y subdesarrolladas.
Esas fuerzas hegemónicas, están llevando al mundo, a un callejón, cuya salida hace prever, un conflicto mundial. Hay guerra por doquier. En Europa, en el mundo Árabe; Israel en un abrir y cerrar,asesinó más de 40 mil palestino; en la guerra Rusia- Ucrania, miles de seres humanos igual de muertos.
El cinismo, el nuevo recurso de gobiernos controlados por mafias financieras, hablan de paz; seguramente la de los cementerios.
Los astros se van alineando. Un incidente que pareciera de poca monta pondrá brillar los cielos, de cargas nucleares, atómicas y gases que en un perímetro dejará millonadas de muertos. No lo digo, científicos señalan que vendrán tiempos de las cavernas. Lo predijo Federico Engels, el planeta llegará a una especie de sobre calentamiento, seguido por un enfriamiento fatal.
Es un escenario,donde nadie se salva, incluyendo a la mafia que domina la sociedad y la humanidad.
El capitalismo de hoy, es salvaje; y como fase de transición, apunta a una posible destrucción de la tierra.
Son tiempos de crisis, donde el poder estará en manos de locos fascistas, que evocán a Adolfo Hitler.
Lo que hagan o dejen de hacer, los dueños y gobiernos de estos diabólicos escenarios, alcanza a todas las naciones, incluyendo la nuestra.
La historia en nuestro país reproduce situaciones parecidas a ese mundo desarrollado que nos está llevando a la catástrofe.
En nuestro país, los números relativos a desigualdades sociales, causan escalofríos. En una relación de uno a diez, una minoría oligarca se quedan con el ochenta por ciento del producto social. Esta gente ha convertido a nuestro país en una especie de satélite de esos superiores y en particular de los Estados Unidos.
Ascienden al poder político y lo ejercen como si el estado le pertenece. El concepto de ciudadano, se ha diluido en una relación de servidumbre.
Nada bueno se puede esperar, de un poder político, que señala que se debe a esos poderes económicos.
Si me preguntan, si el país ha cambiado, contestaría con un rotundo ¡no!
El país ha evolucionado hacia un punto, que tenderá a generar más tragedias, calamidades doméstica e incertidumbre.
A los mortales panameños, lo único que les queda, es el sentido de la esperanza y optimismo.
Las garras del imperio y su lacallos, nos tiene agarrado por el cuello. Esta realidad tiene que cambiar para que la real libertad brille.
No hay lugar al derrotismo; tarde o más temprano, llegará la hora de los tiranos y mafias que son la expresión de un capitalismo decadente, que desprecia a la humanidad.
La actitud y comportamiento de gobiernos hegémonicos mundial y en plano interno, orilla a mafia. Estado de derecho y democracia, mas que generar civilización, reproduce barbarie.
El estado mafia, no es un decir, es una realidad y muy tangible.
