El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por: Ramiro Guerra
La asamblea nacional electa, centra (sus diputados) en una serie de maniobras, para ver quién se alza con el control de ese órgano del estado.
Desde afuera, el ejecutivo electo, usando la influencia que le da el poder, para abonar en dirección a una asamblea que no le complique el ejercicio de gobernabilidad. Tempranamente tendió puente al movimiento Vamos y recién se ha reunido con otra bancada.
En este escenario, hay cables cruzados y pelados, que veremos correlaciones de fuerza donde tirios y troyanos, procuraran un compás, no necesariamente favorable al ejecutivo.
No soy dado a realizar análisis de naturaleza apriorística. Pero hay indicios, no tan sólidos, que nos llevan a inferir, que el empresario Ricardo Martinelli, su partido, que llevaron a Mulino a la presidencia, juega a su propio partido.
Mulino les ha tendido puentes a enemigos de Martinelli, los mismos que se valieron de todos los recursos, para aislarlo y condenarlo a un ostracismo carcelario.
Pienso que el expresidente electo, tempranamente ha incurrido en errores, que talvez le reviertan temprano.
El expresidente juega a una correlación en la asamblea nacional que, mediante una amnistía, lo regrese a la calle.
Para el expresidente, el salvo conducto, no lo satisface. Posiblemente si conviene al nuevo presidente. La carta Camacho camina en dirección a una amnistía.
Post instalación de la asamblea nacional, a esta y a los diputados, se le vienen grandes desafíos, por algunos proyectos de ley que están en cierne. Verbigracia el tema de la Caja de Seguro Social, un nuevo contrato con First Quantum, como lo han señalado algunos asesores del gobierno, para abrirla y después cerrarla. Igual, sobre la población, gravitan medidas duras de ajustes estructurales.
Aclaro, el presente análisis tiene juicios propios de un enfoque apriorístico.
Todavía tendrá que correr mucha agua debajo del puente.
Mientras el ejecutivo no da muestra de tender puentes al movimiento social. Pienso que no lo hará. Conjeturo que incurrirá en el mismo error del gobierno Cortizo. Nunca le interesó algún entendimiento con el movimiento social y sobre todo los sindicatos y otros medios.
En esa dirección, igual comete la nueva ministra de educación, que no ha llegado al ministerio de educación y hace alarde de dura.
Amanecerá y veremos.
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