¡Mensaje a Dios y al Gobernante!

Por: Gloria Hernández
Recordando a un maestro, al inmortal Galeano y su obra: ¨Los hijos de los días¨, observo el escenario Patrio. Escucho, veo vídeos de incontables historias de abuso del Poder. Esas que acrecientan la impotencia, la idea del miedo, esa idea de que ¨no se puede lograr¨… de que se gobierna para reprimir a unos y a otros no … Frases deconstructivas que se materializan en acciones, silenciadas por medios televisivos pero muy sutilmente proclamadas a nivel internacional, como carnadas para atraer inversionistas, para difundir veladamente la represión ejercida sobre el pueblo. Expresiones como:
…¨ siempre la racionalidad económica prevalece sobre cualquier intento populista¨
Escenarios que algunos al principio agradecían y comentaban: ¨qué bien, es el único que se atrevió a ordenar, a callar a Esos¨… hasta que se han dado cuenta que el orden no fue orden sino represión y no para Todos… que se multiplica y avanza con su paso firme destructivo tocando uno a uno, a cada panameño con sus pronombres: Yo, tú, él, nosotros, vosotros… sean catedráticos, agricultores, ganaderos…hasta hacernos ver en el espejo de Ellos, de esos… de los primeros en ser reprimidos…
Así, tratando de escuchar y comprender la historia que se desarrolla, la realidad que viven muchos panameños… una Jornada de Mantenimiento y Limpieza Residencial me permitió analizar, cómo en cinco personas se resumen las consecuencias del Poder con represión y el pronombre: Ellos.
De Ellos enfoqué, en primera instancia, la importancia de sus talentos, de sus habilidades, sus colaboraciones. Personas trabajadoras, responsables, puntuales, que hacen un trabajo con detalle, con amor, con dedicación.
Una señora indígena, por ejemplo, limpia la casa. Uno de los señores realiza trabajos de albañilería, de fontanería, de electricidad. Otro, es mecánico y arregla los daños en una camioneta. Otro Sr. elimina de raíz la maleza, poda los árboles y el césped, pica y embolsa la poda. La coloca en la cesta de basura. Un joven, especialista en refrigeración arregla una refrigeradora. Son trabajadores leales que han coordinado un día extra de trabajo con otros panameños que pagan sus servicios con dinero de sus salarios o jubilaciones. ¡Ellos, buscan una oportunidad de trabajo para poder cumplir con sus obligaciones!
Ellos, tenían trabajo permanente en empresas que cerraron o redujeron el personal. Situación que los está afectando profundamente al igual que a otros empleados, a los miembros de sus familias. Situación que ya era seria en anteriores desgobiernos y hoy, se agrava, se intensifica en un año y cuatro meses de toma de posesión de uno nuevo. El que, en uno de esos jueves comenzó a incumplir promesas electorales. Informó con mucha expresión facial y sin explicación verbal para sorpresa de algunos y de Todos: ¨… mi gobierno apoya a la empresa privada, a nadie más … que permee también a los que no son empresa privada … para que les llegue algo de las grandes cosas que pasan en Panamá¨
Información que vamos analizando y comprendiendo … y ante la intención… lo que se observa es un presupuesto que sufre contención en instituciones de salud, de educación… Una economía área que por más que viaja, no aterriza ni en aeropuertos, ni puertos… ¡Menos a la mesa casi vacía de muchos panameños! Economía que no explica ni evidencia ¨las grandes cosas que pasan¨… que sigue un rumbo desconocido, cerrando empresas o viaja a la deriva sin resultados concretos, sin enfoque: ¡Sin dirección!
El gobernante en su gestión no tomó ni tomará en cuenta a la población, como si el PIB nacional fuese de su propiedad y de reparto exclusivo entre la élite de su preferencia. O prioriza obras que el Pueblo no rechaza, sino que sugiere se solucionen primero algunas necesidades vitales de la población.
Otro aspecto que analicé de los trabajadores fue el de sus valores. Todo el trabajo, todo el sudor de estos hombres y mujeres colaboradores no tiene precio. Hoy, se enfrentan a situaciones inmerecidas, sorpresivas. Y, ante sus realidades, llaman a personas conocidas para ganarse un ¨camarón¨ porque son personas honradas, con dignidad. Su familia ni ellos han obtenido riquezas a través de administraciones gubernamentales ni contactos políticos. Ni han vivido de imágenes.
¿Cómo no apoyar como gobernante al Pueblo? Gestionar soluciones a sus problemas: empleos dignos, salud, educación, agua…
¡Cuando en la oferta y la demanda todos nos necesitamos: empresarios y trabajadores!
Los trabajadores también quisieron ser profesionales, aprovechar sus talentos. Pero no tuvieron la oportunidad, un mentor, una herencia familiar para llegar a profesionalizarse. Una beca necesitaba el visto bueno de un político. Un préstamo exigía una propiedad como aval, un salario permanente de un familiar o un fiador. Aún con esas desventajas (que aún persisten) no fueron ni son maleantes ni representan un coste extra para el Estado. Con su trabajo honrado se ganan cada día el sustento para ellos y su familia. Son ejemplo dentro de sus hogares y sueñan con un futuro mejor.
Hoy, enfrentan esta crisis económica no esperada ni explicada pero muy bien documentada (desde sus orígenes hace 35 años, causas y causantes) como para abrir procesos penales y aplicar sanciones.
¡Se sienten burlados ante el incumplimiento de promesas electorales!
Se preguntan: Sí, el pecado de Ellos fue: ¿votar, creer, no ser delincuentes o ser pobres? ¿Por qué tanto odio y desprecio? Si con sus talentos y sus manos, ellos y muchos panameños han colaborado en la construcción de un país hermoso: con envidiables paisajes urbanos, residenciales, hoteleros; con paisajes rurales. Con puertos, aeropuertos, autopistas, estadios, catedrales …con un paisaje canalero…
País hermoso que observan como lo deconstruyen silencios cómplices, desfalcos en instituciones, la falta de transparencia en el manejo del PIB nacional. Salarios especiales que protegen decisiones incongruentes. El nepotismo que no se investiga en las esferas de Poder. Los beneficios particulares que favorecen la falta de contrapeso … Crisis que se pueden enfrentar si se aplican con equidad las leyes existentes, los dictámenes de la Corte Suprema de Justicia. Si, en el rejuego del reparto económico equitativo: ¡Al pueblo y al empresario se les valora por igual!
Dialogando con estos trabajadores a la hora de la merienda, uno de ellos comenta que tiene una hija, la primera de la familia en ingresar a la universidad. Desempleado hace pocos días, le costará enfrentar esos gastos. Otro, que también despidieron del empleo expresa: me endeudé para sacar un carro de trabajo y hoy, sigo pagándolo con más esfuerzo y sacrificio. A mucha población le falta el dinero. El albañil dice: me casé hace un año, hice mi casita con ahorros y mis conocimientos de albañilería en un pequeño lote que nos regaló un familiar; mi hija de meses me inspira a doblar las horas de trabajo. Trabajaba con un contratista: las empresas de bienes raíces también presentan un futuro incierto. El mecánico trabajaba en un taller que cerró. Actualmente trabaja desde su hogar o acude al llamado esporádico de algunos conocidos que necesitan de sus servicios. Indica: hoy, enfrento el día a día con mucha incertidumbre. ¡Llevar el pan a casa cuesta cada día más!
Y la Sra.… pagó mensualidades, matriculó poco a poco los cursos, por seis años consecutivos en una universidad privada, fue constante en sus estudios y pago de matrículas; este año esperaba pagar los trámites de su diploma, recibir su título de licenciada en educación primaria, trabajar entre los suyos, los de su comarca. Vive en una barraca y ese espacio que la cobija también está próxima a perderlo.
Ella, trabaja ahora en más casas de familia por sus tres hijos, por mantener en ellos la llama de la esperanza, su educación y alimentos. ¡Su deterioro físico es notable, el dinero no alcanza!
Hace un mes a su esposo lo despidieron de la empresa donde laboró muchísimos años. Todavía no recibe sus prestaciones laborales. Si ese humilde padre de familia no encuentra otro empleo en seis meses, lo espera la ley 462, quizás no sea para premiar su desempleo u otorgarle una jubilación digna.
Los empresarios actualmente están prestos a no perder oportunidades, a seguir las pautas recordando que el derecho sindical ha perdido representación, liderazgo. Una situación inaudita que desde la esfera gubernamental desprotege a la población trabajadora de la opresión de inversionistas, incentiva el desempleo. La pobreza multidimensional avanza. Alcanza hasta a la clase media y la clase media alta resienten el impacto.
Terminada la jornada de trabajo y de vivencia entre talentosos trabajadores del pueblo, me quedo pensando: ¡De lo que se ha perdido y se pierde el Gobernante! Del contacto con su pueblo. De la conversación que inspira cambios mentales, desarrolla empatías, infiere toma de decisiones integrales. De la franqueza y la sencillez de esas personas. Del chiste que provoca una lágrima pero que indica cómo se toma la vida. De lo curativo de una carcajada cuando se aplica el sentido común ante la adversidad. De la importancia de vivir con la conciencia tranquila ante la responsabilidad cumplida. Ante la dignidad ni la libertad vendida. De lo mucho que los pronombres, sobre todo, Ellos: nos acercan más a la realidad. A la equidad. A la solución de los problemas patrios en conjunto con empresarios, con Ellos y el Gobierno.
¡Pilares que en franca armonía dinamizan la economía, el desarrollo y crecimiento económico del país!
La autora es Geógrafa. Con especialidad en evaluación y conservación de recursos naturales. Investigadora.
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El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.