Paradoja social

Miguel Montiel-Guevara 24-12- 2022

Sería una paradoja social que los pobres no lucharan contra su pobreza y los ricos lucharan contra su riqueza. De ahí, gústenos o no, las “luchas de clases”. Eso hay que tenerlo presente. Democracia y socialismo, futuro de la humanidad sin tiempo previsto es utopía terrenal que llevará años, quizás muchos, muchos años hacer realidad. Aunque tampoco tanto para decir como don Juan o don Quijote ¡Cuán lejos me lo fiais! Así que en el ínterin es necesario luchar por hacer la vida cotidiana, esa de Lukács, digna de vivirla, aunque solo sea para contarla como dice Gabo. La táctica del caos logró su objetivo. Obligó al gobierno sentarse y negociar en una mesa de diálogo, a todo color por televisión, con el arzobispo católico panameño como mediador. Bien hasta aquí. Por otra parte, nunca había visto al alto empresariado panameño agruparse así cerrando el puño. Ahora bien, en esta coyuntura no es el objetivo inmediato del movimiento social popular la toma del poder anunciada por uno de los principales dirigentes sindicalistas.
Coincido con las palabras del poeta mayor Pedo Rivera: “Debemos recordar que eso de tumbar gobiernos y cambiar sistemas estructurados deviene como un proceso de acumulación, uno de cuyos mandamientos—previos— es hacer camino, es decir, llegar hasta donde se pueda llegar, estar preparado para dar dos pasos atrás y uno adelante, ojo al Cristo para no caer en la tentación de arrojarse de cabeza y sin paracaídas, a la manera de ¡buen salto!, con la maleta repleta de sueños imposibles. (…) Mi deseo más ferviente es que no se produzca el desmantelamiento de las conquistas alcanzadas, o por alcanzar, ejecutando actos imprudentes, triunfalistas, derrotistas, desesperados o sectarios. La lucha continúa”.
Así las cosas, aún hay caminos por andar, metas por alcanzar. ¿El mayor uso colectivo posible dónde está? No existe sector productor estatal significativo generador de empleo. ¿Por qué jubilaciones con privilegios? ¿Hasta cuándo soportaremos impotentes la cleptocracia que nos corroe? Decíamos ayer y decimos hoy: Panamá necesita un estadista progresista que sepa gobernar sin mandar. Pronto habrá oportunidad de encontrarlo por vía de la democracia electorera-representativa y poco participativa que tenemos. Si no aparece, creyente o no, ¡Qué Dios nos agarre confesados! Sea.

2 Hay varios Likes:) Gracias...