PANAMÁ, SU CRISIS, PODER Y GOBERNANTES.            

POR RAMIRO GUERRA M.        ABOGADO Y CIENTISTA POLÍTICO.    

Se podrán gastar todas las millonadas en publicidad, pero el gran perdedor en esta crisis de la última semana, ha sido el gobierno y el presidente Laurentino Cortizo. Ha salido o saldrá bien lastimado y en evidencia de lo desacertado que ha sido su gestión. Me escribió el abogado y analista político, Guillermo Benitez y me dijo el problema de fondo, el gobierno ha jugado a un estado subsidiario, clientelista y marcadamente lesseferista. Esto último cuando evade a entrar a examinar y corregir las reales distorsiones de la economía como el de los oligopolios, entre ellos los grandes del negocio de la medicina, energía eléctrica y cadenas de supermercados. A lo anterior se sumó a su poca o nada resolución de abordar y como abordó los temas de Panamá Port y Minera Cobre, este Panamá, que ha hecho lo que le viene en gana. Ha quedado probado, que las políticas asistencialistas, no frenan el malestar y la indignación de los pueblos. Omar Torrijos, lo tuvo claro, cuando dijo, que un pueblo embellacado, no hay barranco que lo detenga.

Pena ajena siento, cuando el gobierno, para deslegitimar la lucha social, saca del armario, el viejo guión, de que, detrás del movimiento social, popular, hay intereses ocultos. Sr. Presidente, si tiene la información, diga quienes son. A propósito, deja mucho que decir un procurador que se presta para ese juego. Haría la pregunta en otra dirección, ¿quiénes son los que han conspirado contra el pueblo y los trabajadores? Lo mismos que imponen la agenda de lo que se debe hacer o no hacer en materia de gobierno y economía.  Un gobierno de diálogo y consulta, ¿con quienes? Tenemos un gobierno y un presidente, cuyo código de gobernar, es el yo mando y ordeno. Ejecútese. Esa es la personalidad del presidente, cada vez que se dirige al país. Extremo centralista y nada democrático. Al punto que viene en picada en cuota de legitimidad social y con ello creándole un grave problema al PRD, que poco o casi nada ha sido parte realmente del gobierno.

Celebro, que el Instituto de estudios nacionales, señale, uno más, que el problema de fondo, un modelo agotado. La Cepal lo ha venido advirtiendo.

Llego a la conclusión, que el presidente es un rehén de palacio y completamente diezmado para asumir el cambio de rumbo y con ello guardar distancia frente a los factores de poder económico hegemónico. El presidente pudo haberse montado en la cresta de ola de indignación popular y con ello hacerse de una cuota de autonomía frente a estos poderes.

Se cerrará la coyuntura, tal vez, un capítulo, pero vendrán nuevos episodios. El FMI está como los buitres, vienen con medidas duras. Lo escribo, las IFiS, prestan dinero, siempre con agenda depredadoras.  Ya veremos.  Dios bendiga la patria

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