El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Panamá, Un País Que Si Ha Podido Inhibir Un Rostro Diferente.
Por Ramiro Guerra M.
Jurista, escritor y cientista político.
Pregunto, ¿cuántos gobiernos de izquierda ha tenido la república de Panamá? Ninguno.
Desde el inicio de la república, todos los gobiernos han sido de derecha. Gran parte de ese iter, la hegemonía en el poder, la tuvieron los oligarcas. Salvo excepciones, gobierno de centro y ascendencia pequeño burguesa. Belisario Porras, Omar Torrijos con fuerte ascendencia en los sectores medios de la sociedad. (capas medias).
La responsabilidad de las sucesivas y reiteradas crisis que ha vivido el país y el empantanamiento en que nos encontramos hoy, ha sido obra y responsabilidad del sector privado de la economía y gobiernos que, en el arte de gobernar han sido pésimos. Nunca han gobernado teniendo como norte el desarrollo nacional. Tal estrategia no ha existido. Hay una que otra propuesta en esa dirección, pero todas en algún congelador o nevera de palacio.
Además de lo anterior, una estrategia de desarrollo nacional sostenible, se construye con la participación de la sociedad, del pueblo y teniendo a estos como su base de sustentación.
Los sectores democráticos – populares, no son tomados en cuenta para el ejercicio del poder. No cuentan. Los espacios de participación ciudadana, limitados casi inexistente.
La democracia deliberativa brilla por su ausencia. En nuestro país, las élites del poder económico y político, desprecian al pueblo.
La gobernanza se sustenta en una especie de centralismo burocrático. Se gobierna en función del status quo. El nosotros mandamos y ustedes obedecen.
Siempre, estos grupos de poder dominante usan las izquierda como chivo expiatorio, cuando esas élites son responsable de todo el descalabro que vivimos. Hablan y escriben mucho sobre corrupción, pero esta ha estado sustancialmente ligada a ellos. Pruebas existen en abundancia.
Torrijos, no fue de izquierda y llevó al país a dar un salto estratégico de calidad. En el pasado igual hizo Porras y otros distinguidos hombres de estado.
Un gobierno que se somete a la empresa privada, está condenado a fracasar. Aquél que se reserva una cuota de independencia relativa frente a esos sectores dominantes, tiene mejores condiciones para ejercer el poder. También lo hizo Arnulfo Arias en 1941.
La oligarquía es sinónimo de atraso. No se puede avanzar con esa gente que tiene como ideología el canto y sonido de su caja registradora.
Son tiempos de desafíos y retos. Salir del atolladero, solo es posible desde una perspectiva de centro izquierda y una base de sustentación ciudadana; democrática, popular.
Dios bendiga la patria
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