
Victoriano Rodríguez Santos
Como casi siempre, la ley atrasada o poco enérgica cuando se trata de ponerle coto a la corrupción, malos manejos, malas interpretaciones o casi cualquier acción que beneficie a políticos, filibusteros o personas que pudieran apropiarse de los recursos del Estado.
Por fin la Corte Suprema de Justicia (CSJ) se pronuncia contra ese adefesio del cual han pelechado dirigentes de partidos políticos y que ha funcionado como algunos expresidentes le llamaron “cueva de ladrones”, sin embargo, no se han visto beneficios de ese organismo, para Panamá.
En nuestros diferentes artículos, cuando del PARLACEN se trata, hemos expresado que en Panamá se incumple el Artículo 2 del Tratado Constitutivo, pero al parecer la política puede más que la voluntad ciudadana.
Reproduzco el artículo de 18 de noviembre de 2004, en el diario El Siglo, cuando expresaba: “Hace años, vienen planteándose medidas restrictivas para disminuir el gasto público. Pareciera se es poco consistente con las providencias a tomar. Observamos la existencia de estamentos y estructuras, tales como el Parlamento Centro Americano (PARLACEN), funcionando más como gasto que como beneficio”.
“El PARLACEN fue creado por dos situaciones puntuales; disminuir o eliminar las guerrillas centroamericanas y la formación de un Mercado Común que permitiera ampliar el comercio de los países miembros, producto de su pobreza”.
“Panamá participa en el mismo para aprovechar la situación comercial, sin embargo, cuando se crea el Mercado Común Centroamericano, nos quedamos por fuera; en consecuencia, si el objetivo principal nunca funcionó, la razón y participación deja de tener sentido”.
“Producto de diferentes factores (entre los cuales no escapa la corrupción generalizada, el uso indiscriminado de dineros, entre otros), se expusieron algunas posiciones sobre la existencia del PARLACEN”.
- “El presidente guatemalteco Oscar Berger, expresó que su gobierno denunciaría el tratado constitutivo.
- El presidente de Honduras Ricardo Maduro cuestionó la funcionalidad del mismo, expresando: «no da resultados positivos» y debía ser reformado o eliminado.
- Y la entonces presidente de Panamá, Mireya Moscoso, expresó que el PARLACEN era una pérdida de tiempo. Que se debería eliminar por inoperante. Que no debía existir. Que nunca estuvo de acuerdo con el PARLACEN”.
“En su momento el ex canciller José Raúl Mulino indicó que cualquiera de los países miembros podía DENUNCIAR sus tratados sin que ello constituya alguna violación a las normas establecidas, inclusive el constitucionalista Miguel Antonio Bernal expresó que la Asamblea Legislativa puede aprobar una ley, de un solo artículo, para retirarse del PARLACEN”.
«El Tratado Constitutivo del Parlamento Centroamericano…», en su Artículo 2, expone que lo integran: «a) Veinte diputados titulares por cada Estado miembro. Cada titular será electo con su respectivo suplente, quien lo sustituirá en caso de emergencia. Serán escogidos para un periodo de cinco años por sufragio universal directo y secreto, pudiendo ser reelectos.» (Negrita y subrayado es nuestro).
“El Artículo 6, versa sobre el Proceso Electoral y expone:” «Cada Estado elegirá sus diputados titulares y suplentes ante el Parlamento, de conformidad con las disposiciones que fueran aplicables de la legislación nacional que regula la elección de diputados o representantes ante sus congresos o asambleas legislativas…».
“Es decir la votación debe ser nominal y directa. Cualquier interpretación que se pretenda hacer, es innecesaria, lo indicado en el Tratado Constitutivo es explícito. En realidad, Panamá nunca ha escogido de acuerdo a lo expuesto en el Tratado Constitutivo. Sería interesante conocer, en términos de derecho internacional, si nuestra participación es válida, pero, independientemente sigue siendo un gasto innecesario”.
Queda por revisar, señores magistrados de la CSJ: ¿Hasta que nivel es necesario u obligatorio que los expresidentes tengan pase de cortesía expedito, si su mandato pudo estar lleno de corruptela, atrocidades, etc., así como mansas palomas? A ningún expresidente se le debe permitir ser miembro del PARLACEN, inclusive, Panamá tiene, por economía renunciar al mismo y de ser posible llevar ese tema a un referendo nacional. Basta de gastos innecesarios. Finalmente: ¿El PARLACEN, popularmente, es o no una organización desprestigiada? Soy el Hijo de Juana. Dios te salve, Panamá.
Economista, educador, máster en Recursos Humanos.
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El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.