El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por: Raúl Ossa
El decreto 903 regula la situación de las ferias para contener los contagios.
Ese decreto fue violentado por el patronato de la feria La Chorrera y las autoridades de MINSA comprometidos con el reducir los contagio del omicron aplicaron las sanciones con determinación.
Pero, según dijo el señor Carlos García, el mismo presidente de la República con un telefonazo revocó la sanción y dejó mal a los actuaron bien..! En vez de de felicitarlos los ridiculizó; Nito dejó a las autoridades de salud guindadas de la brocha, desautorizados y desmoralizados.
El decreto aplicado es un decreto firmado por el propio Nito Cortizo y por el ministro de salud y es parte de la normativa de la República que debe respetarse. Pero en el propio Nito Cortizo creó la impunidad en este sentido desautoriza a sus propios funcionarios y les quitó todo vestigio de autoridad para mantener la disciplina y darle prioridad a la seguridad y a la salud del pueblo.
La politiquería ultrajó a las ciencia; la politiquería contrajo a la ley…!
Bueno, pero dicen que donde manda capitán no manda marinero…! Pero es contrario al bienestar común, a la moral y a la ley y muy lamentable que en este caso el capitán haya cogido a los marineros y los ha tirado por la borda solo por haber actuado correctamente.
Como Presidente pudo aconsejar una sanción menos severa (5,000 $ multa) pero promovió la impunidad.
Los humildes que sudan en las fondas no tenían q pagar las culpas del dueño de la feria, pero la aplicación de la multa dejaba bien a los de las fondas, al Minsa y al propio Presidente y hubiera enviado el mensaje correcto a todas las ferias y a toda la población.
Panamá necesita gobernantes estadistas..!
