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La compensación es un derecho, cuando el esfuerzo y el sacrificio es nuestro.

¿Qué impide a un país? Solicitar compensación, por su esfuerzo en impedir que la droga que no tiene como destino su territorio, llegue, a U.S.A o Europa?

“El Justo”.

Conscientes que tenemos compromisos internacionales que se sustentan en un contenido ético, que nos obligan a tomar acciones para impedir que la droga entre a nuestro territorio o continúe a su destino final, generalmente U.S.A, Europa o Japón, en lo que incorrectamente se ha denominado la guerrea contra las drogas, a partir de la Convención de Viena de 1988, la obligatoriedad debe ser de doble vía y justa, respecto a los Estados de mayor consumo o destinatarios.

En estos momentos, la mayoría de la doctrina sostiene que la llamada guerra contra la droga, ha sido un total fracaso, toda vez que, cada día se siembran más plantas de coca, se produce más cocaína o droga sintética como los derivados de la ketamina, por cierto, esta última además de ser más fácil, menos onerosa de trasladar, tiene un mayor rendimiento económico que la cocaína para los traficantes, aún la cocaína tiene un mercado de consumidores muy importante.

El fracaso de la denominada guerra de la droga es tan evidente, que la despenalización de la venta, cultivo. consumo de marihuana, está en pleno crecimiento en la mayoría de los países y estados en U.S.A.

Cuando un país, enmarca sus esfuerzos en impedir la entrada o el trasiego de la droga en su territorio, como el nuestro, Panamá, entendemos el compromiso ético que imponen normas internacionales vigentes, sin embargo, esto a su vez genera lo siguiente: A. Los cárteles de origen de la droga o exportadores, organizan o corrompen a ciudadanos para que constituyan organizaciones internas, como un brazo exterior de estos, le ofrezcan logística para que el producto ilegal llegue a su destino. B. Estos cartelitos, que no siembran plantas de coca, ni producen la cocaína, cobran cierto porcentaje por custodiarla, llevarla a otro sitio o suministrar otras logísticas a los dueños de la droga. En esa tarea, utilizan toda la violencia posible. C. Por otro lado, esto permite que surjan a otros grupos, que tienen como finalidad sustituirlos o quitarle la droga para venderla por si mismos o porque trabajan para otro grupo, incrementándose así, más la violencia. D. Los cárteles y los pequeños grupos delincuenciales internos o brazos de los cárteles mayores, mediante la corrupción logran ingresar al torrente legal, los dineros o bienes producto de la narcoactividad, a esto se le denomina blanqueo de capitales. E. Muchas veces los cárteles remuneran a las organizaciones internas, no con dinero porque no han vendido la droga, sino con cierta cantidad de droga y esto genera más violencia, corrupción.

Básicamente este es el escenario del crimen de la droga en nuestro país.

El país en el cumplimiento de sus obligaciones éticas respecto al crimen de la droga, utiliza grandes recursos, policías nacionales, unidades de SENAFRON, de la AREONAVAL, DIP, funcionarios de las Fiscalías de Droga del Ministerio Público y recursos del Órgano Judicial, atenciones médicas y otros. Esta tarea, monetariamente le es muy costosa al país y solo recibimos de vez en cuando un helicóptero, una embarcación y otros insumos menores.

De acuerdo a informaciones de fuentes oficiales de U.S.A, anualmente pese a que nuestro país evita que ingresen a esos países cientos de toneladas de droga como la cocaína, tienen que invertir, solo en su sistema de salud en problemas relacionados con las drogas, la astronómica suma de 670,000 millones de dólares, por las sobredosis y el costo de la violencia mayoritariamente por uso de armas de fuego.

Nuestro país no es el destinatario de la droga, pero debemos reprimir el trasiego o producción, no obstante, ahora resulta que además de todos los aportes que damos gratuitamente a U.S.A, debemos comprar un incinerador por varios millones de dólares que no tenemos en el presupuesto.

Es hora que U.S.A., que no ha hecho su tarea para prevenir el consumo de drogas, nos compense el esfuerzo para evitarle que más droga llegue a su territorio y que más de sus ciudadanos mueran por sobredosis, por la violencia o las familias se desintegren.

Actualmente el país enfrenta el más grave y profundo problema financiero de su historia. Es la quiebra del fondo de invalides, vejez y muerte, que a su vez es la quiebra del país. Ante esta situación no es antiético ni descabellado, que la autoridad competente logre un acuerdo compensatorio con U.S.A, por cada kilo de cocaína u otras drogas incautadas. Proponemos una suma que representa una inversión para la salud interna de ese país, &10,000, por cada kilo. Considerando las incautaciones anuales, más de 120 toneladas, de conseguirse esa compensación el Estado puede hacerle frente al déficit del fondo de ivm.

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