El Periódico de Panamá Revista de Análisis Político, Económico, Social y Cultural.
Por: Ramiro Guerra.
Jurista, Escritor Y Cientista Político.
EL expresidente Joseph Robinnette Biden, en uno de sus últimos discursos, vaticinó que, el gobierno de Donald Trump, sería la expresión de una coaligación de archi millonarios, (oligarquía financiera), sin ética alguna, inescrupulosa (con un sentido maquiavélico del ejercicio del poder.).
Biden acotaba, que esa mafia, algunos de ellos nombrados consejeros del presidente, llevarían a la relativa democracia de los Estados Unidos, a una crisis pocas veces vista en esa nación.
Ese control de esa mafia financiera en lo político, es un fenómeno que, da cuenta de una perversa concentración del capital, a la cual se llega mediando grados de explotación salvaje de recursos y vidas en todo el planeta, sin reparar el daño a la humanidad. Dicho en un lenguaje sencillo, se trata de una etapa del capital que se torna perversa.
No hay ética alguna que frene esa gula de capital, aunque para ellos tengan que morir millones de seres humanos. Es una etapa del capital que se torna depredador .
Es una etapa del capital que, guardando las proporciones, nos obliga a mirar hacia el pasado, de la acumulación originaria de capital.
Con justa razón, se señala que, el gran salto de desarrollo del capitalismo en Europa y los Estados Unidos, se dio a costa del subdesarrollo de los países tercermundista. (ahora pobres)
El desarrollo de la inteligencia artificial y la tecnología en general, puesta al servicio de la sociedad, es positiva; su socialización, deviene una palanca para el desarrollo de una sociedad humanista.
Esta tecnología, caso de los Estados Unidos apunta hacia otro lado, para ponerla al servicio de la guerra, de control de masas y regiones, se constituye en una herramienta de poder, para afianzar el sometimiento y la hegemonía de la oligarquía financiera.
Cierto que los Estados Unidos, marca número uno en esa tecnología de inteligencia artificial, pero recién China, llamó la atención, sobre el hecho de que ellos han invertido 50 veces menos de lo que han invertido los Estados Unidos. Dejando entrever que, en los Estados Unidos, los sobre costos, son o se traducen en una especie de corrupción escandalosa, donde estos grupos de poder, se han hecho de sumas archimillonarias. Y lo peor, el régimen las promueve. Y así ocurre en otros campos de la inversión pública.
La historia del capital, tras si ha dejado millones de muertes. Esa ha sido su naturaleza (acumulación originaria y ahora en esta etapa de neoliberalismo criminal).
El capitalismo no puede prescindir de la mediación prebendal que se conoce como corrupción.
Razón tienen científicos que, abogan por reglas claras, transparentes del uso de la tecnología y en especial lo relativo a inteligencia artificial. Purgarla de tipo de injerencia y motivaciones enervantes de la conciencia crítica.
8 Hay varios Likes:) Gracias...
