Laarbitrariedad mostrada por este gobierno en forma arrogante, ha dado al traste con lo poco de credibilidad de instituciones como IPACOOP que lejos de responder a la Ley, ahora se ha convertido en un garrote al servicio del presidente Mulino y como instrumento de represalia contra el Sindicato de los Trabajadores de la Construcción, (SUNTRACS), ordenado el cierre de la cooperativa asociada al mismo.
La violencia y la arbitrariedad tiránica que está empleando el Gobierno nacional, no tiene precedente y esa conducta es la autora y responsable de la alta tensión y crispación que vive la sociedad en la actualidad.
Es decir, tenemos un gobierno que se empeña en enfrentar desde el Estado, a la sociedad que mayoritariamente no respalda al gobierno, porque a este gobierno en la actualidad solo lo respalda la oligarquía que no tiene ningún arraigo por la patria. Ello conjura todo ambiente democrático y de respeto a la Ley, La Constitución y al Estado de Derecho.
Es ilegítimo e ilegal, el uso de la maquinaria del Estado para enfrentar a una parte o a la sociedad entera, pero eso es lo que desarrolla en la actualidad el gobierno nacional y que, encuentra en las personas decentes y todos los demócratas, una franca y decidida oposición a tan deleznables propósitos que le causan un supremo daño al país y los panameños.
Ojalá la conducta del gobierno cambie, antes de enfrentarse a la mayoría social y a dejar absolutamente de lado la Ley y el orden jurídico para darle paso al capricho, la arbitrariedad y la tiranía, en donde no se rescata la dignidad humana, la soberanía nacional y se desconoce la soberanía popular.
En esas circunstancias, el pueblo haciendo uso del derecho de rebelión, deberá rescatar a la patria y el estado de Derecho.